Los 5 primeros días de cada Onda Encantada son de introspección y profundo trabajo en la raíz. Parecido a un árbol de Bambú, que antes de brotar crece sus raíces durante muchos años; antes de exteriorizar y expandir nuestra energía toca realizar el trabajo fortalecedor, anclador, nutridor y enraizador de mirar hacia adentro.
El día de ayer ya hemos identificado nuestro propósito y esclarecido nuestra intención para estos 13 días. Si es que no lo hemos hecho conscientemente, con seguridad lo hicimos desde nuestro subconsciente que siempre está vinculado a la Mente Planetaria. Siendo la Mente Planetaria quien recibe la energía de cada Onda Encantada, todos nosotros automáticamente la recibimos también. Un paso siguiente es conscientizar esta energía y fluir con ella a sabiendas de que está disponible en toda la Tierra. (Para saber de qué vienen estos 13 días podemos ver la publicación anterior aquí).
Hoy estamos recibiendo la energía del Perro Lunar, que representa el desafío de toda nuestra Onda Encantada de 13 días. Se nos muestran los blancos y negros de nuestro accionar con respecto al mundo emocional de la luna. Es un excelente día para descifrar aquellas viejas programaciones limitantes que aún puedan estar almacenadas en nuestro sistema y tomar nota de ellas para liberarlas durante estos días. Podemos también comenzar nuestro proceso de reprogramación del mundo subconsciente.
La pregunta es: ¿Qué cosa dentro de mí mism@ me impide abrir completamente el corazón hacia el Amor Puro, Incondicional, Infinito, Ilimitado y Verdadero? ¿Cuáles son y dónde están las ráices de mis creencias limitantes?
El Perro representa la lealtad a nosotros mismos, a nuestros sueños y deseos más verdaderos, así como nuestra capacidad innata de ser guía de nuestra experiencia en la Tierra. Saber desde el corazón qué nos toca realizar, dónde, cómo y cuándo. Estos atributos del Perro es mejor que se cultiven primero hacia el interior para, desde ahí, ser manifiestos hacia afuera. Es decir, Amor Verdadero, lealtad y guardianía de nosotros mismos.
Una de las claves más grandes y más simples para abrirnos hacia el Amor Verdadero es el Perdón. Pero el perdón real, no las disculpas.
Lo
que sea que crees que te hicieron a ti,
te lo estás haciendo tú a ti mismo.
te lo estás haciendo tú a ti mismo.
Lo
que sea que crees que le hiciste tú a alguien más,
te lo haces a ti mismo también.
te lo haces a ti mismo también.
Si
alguien creyese que tú le hiciste algo,
en realidad se lo hizo a sí mismo
Si no quiere verlo, puede pensar que se lo hiciste tú.
en realidad se lo hizo a sí mismo
Si no quiere verlo, puede pensar que se lo hiciste tú.
Perdonar en el fondo no tiene que ver con nada de lo que pasó ni con nadie más que uno mismo. Es puramente una liberación de la energía estancada en cualquier condición de la vida que estamos viviendo. Conforme comprendemos que somos nosotros quien orquesta todo lo que sucede en nuestra vida y que somos todos nosotros, desde la mente planetaria, quienes creamos cada situación que acontece en este planeta; vamos entendiendo también que no hay nada más que perdonar que a nosotros mismos. Esta clave puede abrirnos las puertas hacia experimentar más profundamente el Amor Verdadero y realmente Incondicional.
Revisar nuestra historia, revalorar y sanar nuestras heridas es muy importante para abrirnos hacia la experiencia real del Amor en todos los niveles. "Muchas no sabemos qué sería la intimidad sin usar nuestras heridas para obtenerla; se nos ha educado para avergonzarnos de nuestras necesidades, y a edad muy temprana aprendemos a vincularnos con los demás por medio de nuestras heridas." (Christiane Northrup, Cuerpo de Mujer, Sabiduría de Mujer)
Hoy es un día preciso para resinificar nuestras heridas emocionales. Las heridas emocionales solo pueden estar ahí si nosotros lo permitimos. Sólo existen si nosotros las sostenemos. Y las sostenemos cuando no nos permitimos liberar lo que sentimos. De ahí la importancia de llorar nuestras penas, gritar nuestras rabias, Amar nuestros amores y manifestar nuestros sentimientos en todo momento. Cuando no nos permitimos hacerlo, algo dentro de nosotros se estanca y esto genera heridas emocionales que luego generan enfermedades físicas.
¿A quién no he perdonado todavía? ¿Qué situación de mi vida presente o en el pasado no me atrevo a mirar realmente? ¿A qué parte de mi historia le puse candado y dejé guardada en el sótano? ¿Qué emociones no me permito sentir y por qué? ¿Dónde, cómo y cuándo estoy frenando lo que siento?
Cuando se trata del Amor, los Seres Humanos tenemos muchísimos tabúes que liberar. Lamentablemente, a muchos se nos enseña que el Amor es algo que se da a alguien cuando es vulnerable, cuando "pobrecito" o "pobrecita" solamente. Cuando éramos niños, probablemente recibíamos más atención y cuidado si estábamos enfermos y suele suceder que, por no alardear, festejamos menos nuestros logros y alegrías de lo que atendemos nuestras enfermedades. Es una pauta social muy marcada en esta época de la Tierra, que seguimos resignificando poco a poco, como deshierbando el jardín.
Observemos cómo nos vinculamos a los demás y a nosotros mismos. ¿Nos damos Amor todo el tiempo o solamente cuando estamos enfermos o atravezando una situación difícil? ¿Utilizamos nuestras situaciones difíciles para "obtener" Amor, cuidado y comprensión o podemos Amar, cuidar, atender y escuchar cuando estamos felíces y todo está bien? Revisemos si hacemos esto con nosotros mismos y/o con los demás también.
El Amor Verdadero no es algo que se obtiene, es algo que nace en y con nosotros. Es nuestro derecho de piso por existir en el Universo y siempre está ahí, disponible en cantidades ilimitadas para nosotros. Cuando nos permitimos ir hacia ese Amor Verdadero y experimentarlo plenamente en todo el cuerpo, todo lo demás se transforma y alínea, es casi instantáneo pero requiere de mucha práctica, determinación y disciplina para manifestarse todo el tiempo en nuestra vida. Determinación y disciplina entendidos como la decisión rotunda y sostenida de ser fieles a nosotros mismos y a nuestra guía interior.
¿Dónde he dejado de oírme a mi mismo? ¿Qué estoy evitando? ¿Qué está diciendo mi corazón que yo haga y no he hecho todavía?
Hacernos todas estas preguntas es sumamente importante para limpiar y equilibrar todo nuestro accionar en la Tierra. El Amor Verdadero es la sustancia más pura que fluye en y a travéz de todo en la creación. Queremos mantener esta sustancia viva, fresca, latente y radiante en nuestro interior y así vivificar todo a nuestro alrededor. De eso se trata el Amor.
... Y el día de hoy, podemos hacernos todas estas preguntas, revisar muy bien nuestra historia y encontrar aquello que debemos reprogramar para experimentar el Amor en un sentido cada vez más profundo, Puro, Verdadero y Esencial.
Nos acaba de venir a visitar un colibrí :)
Lo que me recuerda estas geniales palabras:
¡¡Buen día a tod@s y a tod@ la Mente Planetaria!!
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