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jueves, 7 de noviembre de 2013

Se Adelantó la Temporada de Lluvias en el Valle Sagrado

Hoy vi cómo la policía y los jueces se traían abajo la puerta de una casa que desde el 2009 había estado ocupada sin autorización de la dueña. Las personas que habían vivido en la casa se fueron hace algunos días, llevándose sus miedos, sus incoherencias y una parte de las cosas que le pertenecían a ella. También vi como ella, la dueña, entraba finalmente en su casa después de más de 6 años, en un acto muy simbólico de reencontrarse consigo misma.

Si bien le habían robado de una manera muy descabellada, y así como las personas alrededor ella también estaba muy dispuesta a firmar los papeles constatando el ultraje y registrarlo todo en fotografías; tenía la serenidad de quien ha hecho bien su trabajo. 

Tenía al mismo tiempo el desconcierto de alguien que ha abierto y desnudado su Alma y Espíritu, dejándose tocar hasta la fibra más profunda... y ha sido herido. Con ese desconcierto entraba por fin a su casa, en sí misma, se reconciliaba con una parte muy suya. Como recogiendo cada pedazo de vidrio roto y colocándolo en su sitio.

La escena era también una metáfora de cuando nos salimos de nosotros mismos, nos proyectamos, nos ilusionamos, nos vamos del eje por lo que decimos es amar o proteger, pero suele ser una sobre-identificación con lo de afuera. Tarde o temprano, y en estos tiempos más temprano que tarde, volvemos a ese centro. Se abren las puertas de esa casa nuestra a la que no hemos podido entrar y que ha sido "saqueada" por aquellos que nosotros mismos permitimos ocuparan el lugar que nos corresponde. Entonces nos toca ordenar, disponer; evaluar la condición en la que están los pisos y las paredes, los techos. Recuperar el Amor primero por nosotros mismos, la entrega total y real a nuestro propio camino desde ese centro y ese eje que tenemos dentro.

La traducción más literal de "breakthrough" al español sería "romper a través de". Una ruptura que es también una penetración... Cuando se trata de romper a través de un estado emocional o un estado de la consciencia, esta ruptura penetrante connota un paso hacia un nuevo estado de mayor claridad.

Éstos días son mucho de eso. Romper a través de los velos que aún nos estaban limitando y que nosotros mismos habíamos dispuesto ahí para evitar Ver, Sentir, Saber y Ser nuestra Verdad más Integra en todos los aspectos de nuestra vida.

Los demás pueden estar impacientes, dubitativos, preocupados, emocionados o simplemente observar nuestro proceso. Incluso algunos podrían enfadarse y sentir que desearían hacer las cosas por nosotros; pero en última instancia, somos nosotros los únicos responsables de dar nuestros pasos hacia nuestra mayor integridad. Somos los únicos responsables de hacer caso fiel y ciegamente a lo que dice nuestro corazón. Y una vez que damos esos pasos, ocurren liberaciones tan profundas y reacomodos tan perfectos que incluso pueda que nos preguntemos por qué habíamos tardado tanto en realizar los cambios y reajustes que ya sabemos son necesarios en nuestro camino. O pueda que no. Todo ocurre en su Tiempo Perfecto.

... Estamos ante un nuevo GRAN inicio en todos los sentidos, y todo inicio tiene un proceso de "ruptura a través" del velo. Como al iniciar una obra de teatro: corremos la cortina. A veces para sorprendernos de lo que hay ahí en el escenario de nuestra vida, a veces para confirmar nuestras claridades y a veces para abrazar con Puro y Profundo Amor las realizaciones de las certezas que ya tenemos en el corazón.

Guerra avisada no mata gente. Pero en este caso se trata más bien de una lluvia. Y no precisamente de bombas y granadas... es una lluvia de Bendiciones :)

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